El primer fin de semana de noviembre, el día 4, los intrépidos voluntarios de Hospital Imaginario acudimos a la escuela de David Monge para participar en un curso sobre cómo entrar en las habitaciones, cómo sorprender a los niños y como aprovechar nuestro físico para realizar mejor nuestra labor en el hospital.
La propuesta de David enseguida nos sorprende porque nosotros entramos pensando en nuestros cuentos, en nuestros trucos de baraja, en nuestros globos...
David nos hace comprender que nuestra labor llega más lejos que todo eso, que nuestros movimientos, que nuestra presencia física también son muy importantes y que podemos probar todo lo que nos vaya surgiendo, personajes, vestidos clownescos, parejas fijas... En fin un abanico de posibilidades a nuestro alcance.
Muy interesante.
